Los estados financieros de una empresa deben reflejar las mejores estimaciones posibles. La cantidad de cada acumulación debe ser una reflexión precisa de los costos incurridos. Como resultado, las acumulaciones siempre deben reflejar la información más actualizada. Esto significa que los gerentes deben dedicar tiempo y esfuerzo a determinar las estimaciones más confiables. También deben estar buscando una nueva información. Si las estimaciones son confiables, los estados financieros serán útiles. Por eso es crítico para garantizar la precisión de estos informes.
En contabilidad, hay dos tipos de estimaciones contables. Una estimación es una cantidad que es probable que un contador es probable que sea preciso, pero no es específico. En su lugar, se basa en el juicio y la experiencia. Se debe revisar una estimación cuando las condiciones y las circunstancias cambien. Además, una estimación precisa debe ser consistente con los hechos actuales. En un entorno empresarial, un contador puede usar una variedad de técnicas para determinar si las cifras son precisas o no.
Hay varios tipos de estimaciones contables. Algunos se basan en información objetiva, pero otros son subjetivos e involucran incertidumbre de medición. Una estimación puede cambiar cuando una empresa reevalúa sus beneficios y obligaciones futuros. Algunas estimaciones son fácilmente determinables, pero otras son altamente subjetivas e involucran cálculos complejos. Las mediciones de valor razonable, por ejemplo, son un tipo de estimación contable. Representan el precio pagado o recibido por un activo o pasivo. La medición de valor razonable es una base para registrar combinaciones de negocios, medir el deterioro de los activos de larga duración y determinar el valor razonable de la buena voluntad.